No somos dueños ni propietarios. Somos depositarios de una causa evolucionista. Y venimos un tiempo nada más, marcado y dignado hasta que llegue ese momento. De aquí no nos pertenece nada, porque dejamos lo que le pertenece a las causas transitorias y evolucionistas; lo dejamos junto al cuerpo y el alma se lleva los hechos y las obras.
Luis Almaguer Aguilera (1)
Tener creencias y prácticas espiritistas en Cuba significa para este tipo de creyente un modo práctico de revalorización espiritual como individuos y como actores sociales, si se tiene en cuenta el tipo de sociedad en que se desenvuelven. Los tiempos en que vivimos exigen un reacomodo de valores, prioridades, e intereses en todas las esferas de la vida y en los niveles de ocupación respecto a la satisfacción espiritual; la religión en estos individuos en sentido general y su expresión religiosa en particular, es lo primordial. Lo que ella sea capaz de darle. Lo que ella lleva implícito, es decir, esa parte de espiritualidad, será el nivel de compensación y satisfacción con que el sujeto podrá enfrentarse a la vida, será su fuerza y será el instrumento que le sirva para medir sus asuntos particulares y tratar de influir en los generales, he ahí parte de su ética como religioso. Ética que en nuestra sociedad y contexto tiene un sustrato humanista”. (2)
El espiritismo en Cuba constituye uno de los fenómenos, dentro del cuadro religioso de la nación, que por su estado de pureza y asimilación de las distintas corrientes religiosas, se manifiesta en la obra de Luis Almaguer Aguilera, como un caso de estudio único, validado desde el análisis epistemológico que parte de la praxis axiológica del fenómeno espiritista, en un campesino que defendió los valores del ser humano en su devenir histórico-lógico, desde el contexto sociocultural rural en la época republicana, y el sentido de la fe a partir del patriotismo y la justicia, por encima del temor a Dios. Lo anterior valida esta investigación, que resulta novedosa por la defensa de una historia de vida con 73 años de ejercicio, que marcan el proceso de evolución en las tres corrientes del espiritismo en la isla, el tránsito de un sistema social a otro y, a la vez, la proyección en su caridad de una posición a favor de la ciencia incorporándola a su praxis de curación de los males del cuerpo y del alma, desde y hacia la fe en el hombre. Así mostramos un nuevo curso investigativo, que visibiliza el libro Agua de la Anacagüita, del proyecto comunitario Ánima del Monte, a partir del Método de Historia de Vida (3), confirmando la pertinencia del estudio de los saberes populares dentro de la psicología de las masas y en correspondencia con la efectividad de nuevas zonas para la investigación desde la axiología del valor.
AEl espiritismo es una doctrina, donde los vivos pueden entrar en contacto con los muertos, a través de un clarividente o médium. Así la investigadora Iliana Hodge Limonta afirma:
“El espiritismo que como expresión religiosa se conformó y sistematizó en pleno siglo XIX, responde a exigencias espirituales de la contemporaneidad. Sus fundamentos teóricos comprendían aspectos contenidos en concepciones filosóficas idealistas y apelan a elementos prácticos esenciales en la vida de los individuos que se corresponde con sus necesidades, problemas y nuevos desafíos en la vida social moderna, sobre todo después de haberse instaurado el régimen capitalista en su fase superior, período a partir del cual el conocimiento ha entrado en una crisis de paradigmas y se hace necesario ofrecer nuevos patrones de conceptualización para tratar de interpretar este mundo convulso, sin que esta nueva lectura posea un carácter propiamente religioso” (4)
Sin embargo, el espiritismo cubano, por su estado de pureza merece investigaciones que dignifiquen el proceso de evolución de este fenómeno sociocultural, de ahí la importancia de estudios de casos únicos, como el de la labor de Luis Almaguer Aguilera, el campesino de Brazo Largo-La Soledad y La Anacahuita, que supo conseguir, en su última caridad del 19 de mayo de 1999, la confirmación que su vida tuvo sentido, porque la dedicó a ayudar a los que buscaban caridad en su hogar de tabla de palma, techo de guano y piso de tierra.
El espiritismo practicado en Cuba muestra un creciente carácter heterogéneo, práctico y utilitario, en estrecha conexión con la esfera motivacional de los creyentes espiritistas, quienes mediante sus creencias y prácticas creen resolver los problemas de la vida cotidiana.
Sin duda, pudiera considerarse el espiritismo, entre las expresiones integrantes del cuadro religioso cubano, como una de las de mayor arraigo popular, al ser portador de un conjunto de rasgos distintivos esenciales como son: la posibilidad de comunicación con espíritus (entes ancestrales a quienes se evoca), a través del (o de la) médium (persona que cae en trance); la ausencia de un clero profesional; un culto no muy costoso, desarrollado con una dinámica de roles intercambiables, donde todos los asistentes tienen la posibilidad de experimentar el contacto directo con seres fallecidos; y la vinculación de sus diferentes variantes con otras manifestaciones religiosas, sobre todo las de origen africano. (5)
Otro aspecto lo constituye la afiliación de esta expresión religiosa a problemáticas concreto-sensibles con alta incidencia en la esfera de la salud. Todo lo anterior convierte al espiritismo cubano en una alternativa religiosa de fácil acceso, por un lado. Por otro, reafirma una postura ética ante las relaciones sociales, lo cual favorece la valoración positiva del creyente respecto a su lugar como religioso y dentro de su grupo, al hacerlo sentir satisfecho ante la vida, al relegar a un segundo plano otros problemas que pudieran afectarlo. (6)
Estos espiritistas orientan sus prácticas religiosas específicamente al intento de sanar enfermedades a través de ciertos ritos, tales como santiguación, despojos, entre otros. Utilizan en sus actividades de carácter religioso diferentes tipos de objetos como vasos, siempre blancos y de cristal, con agua; una bola de cristal, imágenes religiosas, o simplemente se sientan frente a la persona aquejada que solicita sus servicios para determinar el mal que le aqueja.
Mal que puede ser una enfermedad real provocada por algún problema específico que esté afectando la salud del sujeto, u otro problema de corte psicosocial. Estas prácticas generalmente se realizan a título personal, estableciéndose una comunicación mucho más directa. (7)
Así, el estudio de la ética axiológica, con impacto en comunidades cubanas del oeste del oriente de Cuba, a partir del método de Historia de Vida con descripciones detalladas de situaciones que permitan estudiar la experiencia humana, es pertinente porque valida el escenario en que se desarrolló el espiritismo y consiguió su cubanización, con ese puente mágico entre africanos o aborígenes, siendo Luisito un defensor de la presencia aborigen, sobre todo por la cercanía del cacicazgo de Majibacoa, en la actual provincia de Las Tunas, pero lo hermoso está en la fusión de las corrientes ancestrales, que logra en el caldero de la ceiba la sustancia definitiva, el caldo primordial de lo que fuimos, somos y seremos: fuimos hechos de barro y de polvo de estrellas. Así encontramos la necesidad de armar historias de vidas que permitan construir con autenticidad la utilidad de esta praxis. Según la investigadora Iliana Hodge Limonta:
El espiritismo es, ante la visión de los creyentes cubanos, expresión máxima de canalización de deseos y aspiraciones, que de modo general repercute en una comprensión individualizada de su misión terrenal. Esta comprensión desde el punto de vista social puede interpretarse como una posición aceptable, si se considera que este tipo de creyente interioriza la idea de que su deber en la tierra es hacerle el bien a sus semejantes para ocupar una buena posición como espíritu después del deceso. (8)
El análisis axiológico del valor positivo, que parte de la naturaleza de los valores de Paul Laupie, merece ser un tema de actualidad, al ver a la axiología como uno de los dos principios fundamentales de la ética, y así visibilizamos este tema vital en la sociedad contemporánea cubana de hoy, en función de los valores objetivos del bien y la verdad, pero la obra de Luis Almaguer Aguilera, ayudó desde la praxis de un ser de justicia, a conformar el accionar ético del campesino en la etapa republicana y el orden de sus direcciones y proyecciones en la sociedad, donde la aprehensión de los valores se realizaba a través de la familia y el patriarcado en su máxima expresión. En este misionero descubrimos que al ser vocero-emisor y la reencarnación de un médico de origen español, (que recetaba agua implorada, pero también medicina industrial, según testimonios de sus seguidores) consiguió una influencia ética por encima de lo paranormal. Como consecuencia su obra resulta un fenómeno vivencial fortuito al asumir la posibilidad de ser mediador entre vivos y muertos, pero también entre vivos y vivos casi muertos. Así conseguimos desde la humildad de un campesino una efectividad de la axiología del valor positivo por encima del subjetivo y hacia los valores fijos, desde el paradigma comunitario con influencia en miles de seguidores, que tuvo y tiene en el espiritista, por su fuerza en el territorio del municipio Calixto García, de la provincia de Holguín, a unos 2898 practicantes, dentro de los 48 897 habitantes, con una influencia transmitida de una generación a otra. Y valida la experiencia de asumir un juicio a favor del bien, la verdad y el progreso. Así Luisito Almaguer profesó un sentido de justicia que superaba el miedo al castigo de Dios para asumir el reto del hombre consigo mismo y su necesidad de un accionar al servicio de lo mejor de lo humano. De ahí los testimonios que presentamos y que dignifican la predica de un actor social a favor de la hermandad, la misericordia, la piedad, honestidad, integridad, firmeza, optimismo, lealtad, honradez, colaboración y perseverancia. Y porque en la actualidad están abiertos y, en pleno funcionamiento, en el municipio Calixto García de la provincia Holguín, 34 centros espirituales cordoneros, con sesiones de instrucción, caridad y de cordón siendo los más reconocidos: “La nueva aurora” de Las Mantecas con la dirección de Renato Méndez. En Las Lajas el que preside Rafael Irene (Felito) Pozo y ”La Libertad” de la familia Ricardo. También, en Buenaventura, se destaca el centro “Comisión La Nueva Paz” de la familia Cecilio y el de Juan Beto, el que se considera seguidor de la obra de Luisito Almaguer. Existen 62 casas de cumplimiento, donde las familias se reúnen y dan vida al espiritismo dentro del plano consanguíneo. Y si visita el barrio de La Soledad, en el Consejo Popular de San Agustín de Aguarás, la bienvenida se la dará el consultorio del médico de la familia, y en San Agustín encontrará una policlínica, que incluye servicios de estomatología, entre otros. Pero, antes de 1959 solo se tenía en Buenaventura, Mir y San Agustín, consultas de médicos privados y la clínica INGRIS, del doctor Nicodemus Regalado, inaugurada el 6 de enero 1954, que contaba con servicios de laboratorio, radiografías y un pequeño salón de intervenciones quirúrgicas. Pero instituciones de servicio gratuito y especialidades, como la psiquiatría, no estaban al alcance de las mayorías. También la ausencia de organizaciones sociales para la mujer y la familia, junto a la marginalidad de la vida campesina, otorgaron un sitio de honor al templo espiritual, convirtiéndolo en la iglesia de los pobres y el centro de la vida social en el campo.
Luis Almaguer Aguilera constituye un caso de estudio único, que valida la praxis axiológica de la filosofía de los valores positivos desde el espiritismo y su evolución dentro de los saberes populares, a partir de la correspondencia entre el contexto sociocultural y el magisterio de la fe en función del mejoramiento humano.
AGUA DE LA ANACAGÜITA: LA LEYENDA DE LUISITO ALMAGUER
Por la Carretera Central, entre las ciudades de Las Tunas y Holguín, se encuentra Buenaventura. Es pueblo que gusta de las décimas campesinas y de bailar con la música del órgano oriental de la familia Ajo. Es también, tierra de peloteros y de espiritistas. Y buscando cura milagrosa, muchos solicitantes se iban, desde la década del cuarenta, del siglo XX, por el camino que conduce hacia San Agustín de Aguarás, hasta el Cruce de Peralta, y luego de caminar tres kilómetros al este, llegaban al barrio de La Soledad, hasta encontrar, cerca de unos árboles de anacahuita, al muy popular Luisito Almaguer.
Luis Almaguer Aguilera, nació el 13 de enero de 1905 en La Cuaba. Su madre: Francisca (Panchita) Aguilera Almaguer era muy creyente. Todavía su altar, presidido por la Virgen de la Caridad del Cobre, se encuentra en el centro espiritual de su hermano Gilberto Aguilera.
Francisca era misionera y luego de recibir en un sueño la revelación de que su hijo tenía una gracia y que no la quería; aguardó por una nueva señal, hasta que un mediodía, lo trajeron sus hermanos, como si le hubiera dado la luz de un rayo. La crisis duró diecisiete días, hasta que fueron en ayuda de espiritistas que trabajaran corrientes fuertes y así comenzó la historia de Luisito Almaguer, en Cuba.
Así inicia Agua de la Anacagüita: la leyenda de Luisito Almaguer. Es un libro testimonial, que puede consultarse en el sitio www.radiojuvenil.icrt.cu y permite yuxtaponer experiencias que confluyen en uno de los fenómenos de la cultura popular con la praxis de un portador y su fluido, convertido en leyenda en las actuales provincias de Las Tunas, Holguín y Camagüey. Así conseguimos una historia de vida, relatada por actores con descripciones detalladas de situaciones que tipifican el fenómeno Luisito Almaguer con la praxis epistemológica del ejercicio espiritual de un hombre dedicado a las curaciones, tanto de los males del alma como del cuerpo y en su evolución se manifiesta como fue decantando escenarios para encontrar su propio espacio en su templo La nueva era de la humanidad, y allí lograr la síntesis que va del espiritismo científico al dador de caridad para culminar en el cordonero, fusionando en una misma praxis las tendencias anteriores con las sesiones de estudio, las de caridad y las sesiones de cordón, que eran masivas con cientos de seguidores. Así podemos hablar de una síntesis, desde la etapa inicial en Brazo Largo: Etapa de revelación y primeras caridades dispersas, luego tuvo permiso para su ejercicio al formar parte de la Sociedad de Estudios Psíquicos Nueva Generación, en el barrio de La Soledad, sociedad que publicó sus memorias en el libro Reminiscencias de un pasado, de Ricardo Palomino, y donde se muestran los conflictos entre cordoneros y espiritistas de mesa, en una defensa a los primeros. Luego da caridad en El corazón de María (Etapa de independencia como dador de caridad. Etapa de confirmación) Por último funda La Nueva era de la Humanidad. (Etapa de consolidación con la apertura de su templo como cordonero, dador de caridad y sesiones de análisis de literatura espiritista de Allan Kardec) Así conseguimos en 73 años de praxis la síntesis de todas las tendencias en una. Y la prolongación de su legado en su familia, que mantiene abiertas las puertas de su templo hasta nuestros días. Así predominaron en Luisito Almaguer los tres elementos de la doctrina espiritista: una concepción sobre el alma, la comunicación espiritual y la teoría del progreso.
PRAXIS AXIOLÓGICA EN LA OBRA ESPIRITISTA DE LUISITO ALMAGUER DESDE EL LIBRO AGUA DE LA ANACAGÜITA
¿Qué valores defendió? Si partimos de que: Los valores personales definen la integridad del individuo con la sociedad en que vive y hacia sí mismo, son determinantes para su crecimiento personal. (9)
En su predica defendía, según las descripciones detalladas de sus seguidores que forman el corpus cualitativo de su obra, los valores positivos de solidaridad, lealtad, optimismo, firmeza, honradez, colaboración, perseverancia, honestidad, dignidad, integridad y patriotismo. Así de los 100 testimonios estudiados en la preparación del libro 68 versan sobre necesarias curaciones del alma, 23 de curaciones de males del cuerpo y otros 9 sobre adivinaciones futuristas, dichas en predicas en sesiones de cordón, cuando se subía sobre la mesa de curaciones y, con su voz potente, daba a conocer las profecías de un padre a su coro familiar. Y supo convocar, sumar, unir y salvar. Sean estos testimonios, una síntesis cualitativa de la necesaria reconstrucción del pasado desde los testimonios y su registro confiado a la memoria como muestra de la transmisión oral entre las generaciones. En este aspecto las fuentes orales, dentro de los saberes populares, ofrecen vivencias que validan nuestra hipótesis. Aquí un muestrario de los relatos de actores que visitaban el templo y que nos permiten estudiar la experiencia humana desde la subjetividad como fuente de conocimiento.
QUÍTALE LA CERCA AL POZO
En el año 1957, un hombre pudiente estaba frente a la cruz. Hasta la capital se había ido con su mujer. El médico consultado, al ver que no había un diagnostico les dijo que fueran con Luisito Almaguer, en Oriente, y así lo hicieron, pero nunca olvidaron los presentes en aquella sesión la expresión de aquel semejante, porque se la cantaron bien clarito. Después de consultar a los mejores especialistas y realizarle radiografías buscando lo peor, la cura estaba en una decisión, en un acto de civismo y bondad al prójimo. Luisito Almaguer le dijo:
-La cura suya es facilita: cuando llegues a tu casa, quítale la cerca al pozo, creo que hasta tiene un candado y llama a tus vecinos, que les niegas el agua y dile que pueden coger toda la que quieran-.
El hombre se fue cabizbajo, hizo lo indicado y se curó. Estuvo visitando el templo durante mucho tiempo. (Testimonio de Waldina Batista Almaguer. Las Tunas. Ama de casa)
A LUISITO NO LO COMPRA NADIE
Por el camino que va hacia La Soledad, vieron pasar un automóvil de lujo. El chofer preguntaba por la casa de Luisito Almaguer. Al llegar anunció que venía de parte de un señor residente en Camagüey, que tenía una hija muy mal. Al escuchar su solicitud, dijo el campesino: -El padre tiene que venir a conversar conmigo-. Al día siguiente llegó temprano el latifundista, que al recibir la caridad, se le habló de su mal comportamiento con la humanidad y por esa causa, su hija estaba enferma. Las lágrimas mostraron la veracidad de lo dicho. Y fue aquella sesión, de apenas unos minutos, un juicio por el mal uso de su poder, por el abuso a las mujeres, el engaño, y bajito le dijo: –Y mataste a una mujer indefensa, por esa causa ha venido a llevarse a tu hija-. Después de aquellas palabras un largo silencio envolvió la estancia, pero el campesino ante el arrepentimiento reflejado en lágrimas, cogió la botella y ofreció la caridad a favor de la joven. Ella se curó y en unos días vino el acaudalado con la suma de $2300.00, que dejó sobre la mesa de curaciones. Al ver aquello, le dijo muy molesto el espiritista: – A Luisito no lo compra nadie. Lo mío es gratuito. Reparta eso a los niños de los orfanatos-. (Testimonio de Edilio Gallardo Morales. Buenaventura. Campesino)
SALVAR SIN PEDIR UN CENTAVO
La médium Mirian Peña tuvo un sueño, que fue una revelación para seguir la obra de aquel hombre. En el sueño, junto a una amiga, visitaban una casa muy elegante. La amiga andaba bien vestida y ella muy humilde. Al llegar al salón, había un médico, que al escuchar la petición de que las atendiera, dijo el galeno a la amiga de Mirian: –A ti si te atiendo, pero a ella no, porque no tiene para pagarme-. Al contarle a Luisito lo soñado, los ojos del anciano se llenaron de lágrimas y le dijo: -Ese médico era yo, que en otra existencia, negué la atención a una joven pobre y mire lo que estoy padeciendo. Ahora, en el cuerpo de un campesino, que vive en una casa de tabla de palma y techo de guano, tengo que salvar sin pedir un centavo-. (Mirian Peña. Buenaventura. Espiritista)
ESTAY SANCIONAO
En su templo, presidido por unos álamos, recibieron sus fieles, lecciones que indicaron que en él había un ser de caridad, pero también un ser de justicia. Una mañana, en medio de la multitud, que aguardaba antes de comenzar la sesión de caridad, había un hombre con mucho donaire. El campesino, mirando hacia los presentes, como sacando una aguja de un pajar, le dijo: -¿Oye, a qué tú vienes aquí? -Tengo un problema-, contestó el señor. -Por sin vergüenza lo tenéis. Te querías aprovechar de una mujer honrada. Querías abusarte. No busque na. Está “sancionao” por la ley. Su mal no tiene cura. Aprenda a respetar a la ley de los hombres. “Estay sancionao-”. Aprovechándose de su posición, aquel señor amenazó a una mujer casada: _Estás conmigo o se tienen que ir de mis tierras_. Fue tanta la insistencia que ella cedió a las presiones, acordando lugar y hora, pero ya en el sitio acordado el se sintió desarmado, en su virilidad, y no pudo saciar sus deseos. Desde entonces visitó a los mejores médicos sin resultado, porque como dijera el campesino: -“Estay sancionao”-. (Testimonio de Romelia López. El Jiquí. Espiritista)
LAS JOYAS CIEGAN EL ALMA
Una mañana vieron traer a un muchacho, que estaba postrado hacía siete años. Su padre y otro señor lo acostaron en un catre. La madre, con aires de burguesa, se quedó en el interior del automóvil. Al ver Luisito a aquel cuerpo tan rígido, preguntó: –¿Dónde está la madre de esta criatura? -En el carro-, le respondieron.
–Dígale que venga, que quiero hablar con ella-. Frente a la mujer le dijo:
–Tu no “hay” visto na mujer, sólo dinero y joyas-.
Luisito roció el agua implorada sobre el cuerpo del joven, y ayudado por el padre, le dieron la vuelta por aquel salón, de doce brazas de largo. El muchacho, entre masajes y fluidos, se fue incorporando. Luisito dijo, mirando a la madre que lloraba: –Vaya, “hay tenéis” una comprobación de lo que es poder-. Ella dijo: –Esto es lo más grande que he visto en mi vida-, mientras veía a su hijo de pie. Al volver en otra ocasión quiso tirarle una foto a Luisito junto a su hijo. Vino un jueves, tomó la foto y cuentan los que la vieron, que la mujer al revelarla descubrió que entre el rostro de su hijo y el de Luisito, estaba la imagen de la Caridad del Cobre. Al llevar la foto el dijo: Mija y todavía tú dudáis que la virgen no existe. Ahí la tenéis, ahí la Virgen de la Caridad para el que lo dude. (Testimonio de Alicia Gallardo Valdés. Mala Noche. Escritora)
LOS BUEYES CIEGOS
Un campesino, de esos bien testarudos, araba bajo el fuerte sol del mediodía y se molestó cuando los bueyes no quisieron seguir. Víctima de la furia, clavó la punta de su garrocha en los ojos de los bueyes. Luego, los animales no se atrevían ni a beber agua en medio del mundo de las sombras, pero en una semana el dueño comenzó a perder la visión, fue a ver a los oculistas y nada, no había mejoría hasta que se fue a ver a Luisito Almaguer. El divisaba a la gente en la multitud e indicando hacia el hombre le preguntó: ¿Oye, qué tú haces aquí? –Te ensañaste con los pobres animalitos. No busques mas y paga lo que hiciste. Le sacaste los ojos y ahora tienes que morir ciego-. (Testimonio de Ramón Acosta. Cruce de Mir. Veterinario)
REENCARNÓ EL INDIO HATUEY
En él, la justicia divina estaba junto a la justicia de los hombres. En la última sesión de cordón de diciembre de 1958, dijo a la multitud:
–Fidel es el indio Hatuey que reencarnó. Hatuey reencarnó en Fidel. Los antepasados quemaron a Hatuey y reencarnó en él y habrá Fidel para rato. Le van a hacer muchos atentados, hasta en tabacos, pero habrá Fidel para mucho tiempo. Lo puso una ley divina y la ley será quien lo quitará-.
Lo decía mientras miraba el símbolo de su templo, que es un corazón con dos palomas. (Testimonio de Romelia López. El Jiquí)
– En los casos representados, gracias a la aplicación del Método de Historia de Vida, con descripciones detalladas de situaciones vividas, se manifiesta como epistemología concreta de los valores objetivos del bien la lucha entre el bien y el mal, la necesidad de unión entre los seres humanos, el sentido de justicia y una defensa a lo cubano como esencia de los valores axiológicos de un ser dotado de la gran misión salvadora, evidenciada en el tránsito de la sociedad capitalista hacia la socialista, donde fue un actor social en defensa de los humildes y un látigo contra los explotadores. Y el ancla, pintada de blanco en el piso de su templo evidencia la necesidad de estar bien firme, anclado en esta tierra de misioneros del honor y del amor. Así la riqueza de la etnología campesina, con su filosofía natural, que tiene como horcones las lecciones de moralidad y amor al prójimo aquí expresadas, constituyen el tributo a un iletrado, de quienes fueron monte adentro en busca de ayuda y validan, la herencia de un ser fascinado, un loco para algunos psiquiatras, pero quienes conocieron a este hombre y recibieron su caridad, dan fe de un fenómeno de adivinación, progreso espiritual y de una ventana hacia las todavía inexploradas, potencialidades psíquicas del hombre. Por último el fenómeno Luisito Almaguer es sociológico y tangible, manejable desde lo etnológico mucho más que en lo teológico. Y el espiritismo, por su popularidad en el municipio Calixto García, es considerado patrimonio intangible, siendo el sistema religioso más extendido por su adaptabilidad, vínculo, relación o sincretismo con otras creencias, y en plena convivencia con el adelanto de las ciencias médicas en Cuba, porque cuando Luisito veía al médico, que reencarnó en él, con un maletín, entonces la ciencia curaría el mal, también él podía observar en el interior de una botella el interior de un cuerpo y ver los estragos de una enfermedad. También gustaba de instruir cuando afirmaba: _Si no se conoce a si mismo no pida caridad_. Ello permite manifestar que Luisito representa la síntesis axiológica del espiritismo en Cuba.
Concluimos que:
– Los fundamentos teóricos y metodológicos que sustentan la praxis axiológica de los valores positivos en función de la ética, en la obra objeto de estudio, evidencian que el espiritismo forma parte de la idiosincrasia del cubano, lo cual lo valida como un fenómeno sociocultural y de masas.
-Luego de ejemplificada la axiología del valor y su impacto en los saberes populares, gracias a la oralidad y su fuerza de transmisión generacional, consideramos que la obra de Luis Almaguer Aguilera, en defensa de la familia, de la convivencia, la nación y la unidad desde el espiritismo, en el contexto sociocultural de las provincias orientales, constituye un caso de estudio único, en 73 años del ejercicio de curación de los males del alma como del cuerpo y, sin negar la ciencia, aunque la ciencia lo negara a él, fue un actor social de la praxis humanista en defensa de los valores que edifican la conciencia, hacia el progreso individual y colectivo.
-Partiendo de la relevancia de la problemática estudiada y el impacto social que de la misma emerge, consideramos que la obra de Luisito Almaguer, manifestada en quienes son portadores de su legado, reafirma una postura ética de este actor social y valida la axiología de los valores objetivos positivos en una nueva arista para la investigación sociocultural del amplio espectro del cuadro mágico religioso cubano.
– BIBLIOGRAFIA
Kardec, Allan: El Libro de los Médiums. Librería de Juan Torrens y Coral. Barcelona, España, l905
Palomino, Ricardo: Reminiscencias de un pasado. (Sociedad Escuela de Estudios Psíquicos “Nueva Generación”, La Soledad, San Agustín de Aguarás, Oriente) Casa Gallardo Impresores, Las Tunas, 1946.
Millet, José: Glosario Mágico Religioso Cubano. Editorial Oriente, Santiago de Cuba, l994.
Sabater Palenzuela, Vivian M. (Compilación): Sociedad y religión. Selección de lecturas. Tomo II. Editorial Félix Varela. La Habana, 2003.
Manuel Paulino Linares Herrera y Javier Ramón Santovenia Díaz: Buenas Prácticas comunicar e informar. Editorial Academia, La Habana, 2012.
NOTAS Y REFERENCIAS
- Predica de Luis Almaguer Aguilera, en sesión de instrucción realizada en l988.
2. Tomado de Historias y creencias. El espiritismo, una realidad cubana. Iliana Hodge Limonta. p 160, del libro de Sabater Palenzuela, Vivian M. (Compilación): Sociedad y religión. Selección de lecturas. Tomo II. Editorial Félix Varela. La Habana, 2003.
3. Córdova (1993:7, El Método de Historia de Vida) define las historias de vida como: «una metodología que no se apoya en procedimientos de carácter estadístico, de carácter muestral, sino que por el contrario, reivindica un aspecto importante del conocimiento de lo social que es la propia experiencia humana, la propia subjetividad como fuente de conocimiento y el relato de los distintos actores, ya sea de procesos sociales, de elementos puntuales de fenómenos sociales que sirven de correlato o punto de referencia para construir el conocimiento de lo social».
4. Tomado de Historias y creencias. El espiritismo, una realidad cubana. Iliana Hodge Limonta. P279
5. Ibídem. p 291.
6. Ibíd. p. 269
7. Ibíd. p. 270
8. Buenas Prácticas comunicar e informar. Manuel Paulino Linares Herrera y Javier Ramón Santovenia Díaz, Editorial Academia, La Habana, 2012. p 79
Tomado de: Blog “Anima del Monte” de Daer Pozo Ramírez
Hola ????????
Muy interesante el artículo, había escuchado sobre Luisito Almaguer, pero todo comentario queda pequeño comparada con la obra de su vida. Sin dudas un ejemplo a seguir. Bendiciones desde la Argentina ????????